A ver, déjame escucharla.
Mira, en cambio, esta es...que te vas a quedar de una pieza cuando la escuches. ¿Ya suena, le has dado al play? Vale...Esta parte no, la de ahora...ya está, casi...Ahora...¿Qué te parece? Buena, ¿verdad? ¿Cómo te puede dar igual? Pues a mí no me gusta la tuya. No se cómo no te encanta, la verdad.
Y es que a todos nos ha pasado eso alguna vez. Hoy me ha dado por pensarlo. ¿Qué hace que una canción en concreto nos llegue a nuestro más profundo ser? ¿Por qué ésta canción, en el segundo 2:20 (en mi caso) nos produce una irrefrenable sensación de plenitud (porque no hay otra palabra), mientras que esa canción nos deja indiferentes? Decía el Joker en una de sus películas que el momento en el que se muestra una persona tal y como es tiene lugar justo antes de su muerte. En mi opinión: Dime qué escuchas y te diré como eres. Al joven activo y alocado le encanta una canción que le agarre del brazo y le lleve en volandas con ritmos rápidos y melodías pegadizas. A la adolescente romantizada (y no me arrepiento de poner género) le encanta sentirse parte de una canción, que sienta que la canción habla de ella. Y a otros, amantes de la perfección, la exactitud y que disfrutan con la armonía (como es mi caso), les encanta sentarse a escuchar y suspirar profundamente tras un pasaje brillante de Chopin o Debussy.
La música es nuestra mejor aliada. Nos llena cuando queremos sentirnos bien y estamos tristes, nos da ese empujón necesario para esos pasos que no nos atrevemos a dar, o simplemente, nos produce esa maravillosa sensación que nada más produce (y repito: absolutamente nada). Es la mejor banda sonora de nuestra vida, hace que nos sintamos en una película. Nos hace movernos de forma sincronizada con la música en nuestro día a día. Hace lo cotidiano digno de un videoclip.
Y seguiría mucho más. Pero es que, cuanto más me paro a pensar, más lejos queda ese horizonte en el que alcanzaría la respuesta. Ante este panorama quimérico, uno solo puede sentarse y comenzar a escuchar aquello que te deja sin palabras...
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