Hacer algo sencillo es muy complicado

Especificar mucho de lo que va a ir el blog es sinónimo de muerte prematura...Un blog que está abierto a más cosas que las previstas admite mayor futuro. Aunque creo que ya planeo demasiado. Tal vez hable de la vida, pues al fin y al cabo, soy "uno de los que pasaba por allí" @IgnacioHernandz

sábado, 14 de enero de 2012

El lenguaje es el culpable

¿A modo de disculpa? Podría ser. Pero más bien es una segunda sinceración.

Sí, justo hoy, he encontrado explicación a esa sensación que me venía cuando decía cosas como "yo lo que haría sería quitar..." Los que me conocen (y los que poco a poco me conocen) saben que lo hago con asiduidad. Pues sí, os costará creerlo, pero...yo no pienso así. Y eso es lo que al parece me quería decir mi subconsciente despues de decir esas cosas. Mis preguntas eran: ¿de verdad quería decir eso? ¿por qué he empleado esas palabras tan duras, si son completamente incompatibles con mi forma de ser? ¿soy bobo? ¿por qué digo cosas que no pienso?

Pues eso, que no pienso esas cosas. La solución (y a su vez salvación) a esa serie de cuestiones internas me ha venido a la hora de la comida, durante una intensa conversación entre mi familia y un buen, muy buen amigo mío. Su inimitable capacidad de sacar conclusiones exageradas (desde el cariño) sumada a mi excelente compenetración con mi hermano, me han hecho verme a mí mismo, y ver la fuente de semejantes estupideces que han estado saliendo de mi boca tanto tiempo, y que tanto, tanto daño han hecho al yo que ve gente en mí. Y comienza así.

Soy una persona organizada. Adoro el orden. Me agota mi propio desorden. Además, he sido educado afortunadamente en una forma de vivir que se resume en "por un mundo mejor". En añadido, soy una persona con un deseo de un mundo utópico. Por eso, desearía que la gente pensase como yo. Ahí es donde la gente se confunde. Quiero que tengan una visión del mundo similar. Eso es muy distinto de querer que sean como yo. Primera confusión por el lenguaje.

Soy también partidario de un mundo verde, limpio, ecológico, sostenible. No soporto a los que consumen, gastan y ensucian. Querer hacer desaparecer es una forma de hablar, eso sí, muy mal elegida. Segundo error con elegido.

Soy una persona a veces cobarde, y por un episodio que no soporto recordar, cogí manía a una gente con una forma de vestir completamente distinta a la mía. Querer hacerlos desaparecer es una forma de expresar mi deseo de alejarme de cualquier enfrentamiento violento. Soy una persona, ante todo, pacífica. Tercer error en la comprensión de mis palabras.

Por esta última argumentación, me produce especial aversión la música que relaciono con la gente que estuvo implicada en ese episodio. Pero tampoco la quitaría, porque esa música puede transmitir de todo, pero casi nunca violencia. Además, sigue unos modelos como cualquier otra obra. Que no me guste ya es otra cosa, pero también lo respeto. Cuarto error de comprensión en mis expresiones. También cometo el error de asociarlo (el terrible episodio y a mi ver, esa estrafalaria forma de de vestir [que ojo, he dicho etrafalaria, que no intolerable] ) con algunas razas en especial. Mi temor a encontrarme de nuevo con esa clase de gente influye en mis palabras. Quinto error de comprensión y expresión.

Llegamos, por fin, a la solución, al por qué de mis palabras.

Soy, sobre todo, una persona con facil tendencia al optimismo (si no no se explicaría ese deseo de un mundo tan utópico). Pero por desgracia, tengo también tendencia en pensar que al primer error el fracaso sea inminente. Es esa desesperación, la de no poder alcanzar esas metas que tanto ansío, por culpa de ciertos episodios que luego, por mis palabras, enlazo erróneamente con otras realidades, la que me hace dictar esos juicios que han hecho temblar ligeramente a mis mejores amigos.

Con esta entrada pretendo tranquilizarlos. Y lo digo: tranquilos, no soy lo que dicen mis juicios. Y los que me conoceis bien lo sabéis.

Ahora ya teneis adjetivos de sobra. Tal vez optimista, facilmente desesperable, utópico, limpio, maníatico de lo respetuoso con el medio, Mr Law and Order, como me llaman en mi familia...

Pero jamás cerrado. Jamás. Y ahora os digo para terminar: escribiré o redactaré genial, pero a partir de ahora mediré muy mucho mis palabras a la hora de dictar mis juicios.

Podéis contar con ello.



3 comentarios:

  1. Yo, también pacifista, precisamente por ser cobarde y absolutamente intolerante ante el dolor propio y ajeno, hasta el punto de ser incapaz de ver cualquier tortura en televisión aunque se vea la marca de tomate que utilizan para simular la sangre, me doy por enterada. Cada uno reacciona de forma diferente. Mi frase suele ser "yo a mis hijos les enseñaré..." . La tuya es impropia para tu verdadera forma de ser, pero gracias a tu disciplina lo arreglarás, estoy segura.

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  2. Me dejas sin palabras Ignacio, aquí no voy a poder sacar ninguna conclusión exagerada :)

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  3. Bueno a ver, para que luego no se diga que no soy un cabrón (y es que uno tiene que mantener el status) te diré que no coincido en una cosa. El culpable no es el lenguaje, el culpable sigues siendo tú que no sabes como utilizarlo...

    Un abrazo grande de tu buen, muy buen amigo!

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